Sagrada Familia: ostentación alegórica en piedra
Sagrada Familia: ostentación alegórica en piedra
Elevadas torres cónicas circulares, fachada que evidencia la altura y ascendencia del diseño, columnas, ventanas y piezas referentes a santos, se vislumbran en la obra más representativa de la arquitectura moderna, construida, en su mayoría, con distintas piedras. Esta edificación ostentosa, ubicada en Barcelona, es el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia. La obra de mayor importancia del arquitecto Antoni Gaudí enaltece a la familia de Nazaret como modelo de familia unida. Dicha obra atrae, con su vibrante riqueza arquitectónica, a cientos de cristianos quienes reconocen este templo como un símbolo más de su fe. Gaudí dedicó los últimos años de su vida a esta majestuosa obra inspirada en la naturaleza y, primeramente, en el mensaje cristiano. Antes de su muerte, solo logró contemplar una de las dieciocho torres que componen la estructura exterior del templo. La mente maestra de Gaudí diseñó inigualables torres, de las cuales doce están dedicadas a los apóstoles, cuatro a los evangelistas, una a la Virgen María y otra a Jesús. En la actualidad, únicamente se encuentran erigidas ocho torres; sin embargo, el templo se halla en la fase final de la edificación después de 134 años de haber comenzado. Prontamente, se terminará de construir el 30% que corresponde al exterior de la iglesia. https://youtu.be/RcDmloG3tXU En este peculiar templo, se encuentran tres fachadas realmente simbólicas: la fachada del nacimiento, llena de vida y de decoración, que representa el nacimiento de Cristo; la fachada de la pasión que tiene como fin reflejar el sufrimiento de Jesús durante la crucifixión y; por último, la fachada principal, denominada fachada de la gloria, que representa la muerte, el juicio final, la gloria y el infierno. El interior de este excepcional templo es como un enorme bosque de piedra; fue inspirado en la naturaleza, por lo que las columnas en forma de tronco de árboles están distribuidas por toda la grandiosa obra. Construir un edificio que reflejara el paisaje urbanístico de la ciudad era el afán de Antoni Gaudí. Esto le permitió mostrar su adoración por la creación de Dios. Por este motivo, La Sagrada Familia es uno de los edificios religiosos más altos del mundo, con 172,5 metros de altura; símbolo de una colosal construcción que mimetiza la grandeza y perfección divina.