Nadar mientras parece que vuelas es el alucinante efecto de esta piscina de 30 metros, ubicada entre dos edificios
La sensación de estar volando al tiempo que vas nadando es el efecto que esta piscina causa con solo mirarla. ¡Y va a ser realidad! El estudio de arquitectura HAL propone esta diferente manera de integrar una piscina en su proyecto de edificios al sur de Londres. La piscina, completamente de cristal de 20 cm de grosor en su base, tendrá casi 30 metros de largo y se situará uniendo las terrazas de los décimos pisos de dos edificios del complejo de apartamentos, permitiendo ir nadando de una zona a otra.
La piscina tendrá una profundidad de agua de 1.2 metros, pero será de 3 metros de alta. Esto es así para, lógicamente, evitar caídas desde dicha altura en que está situada la instalación.